Hoy te quiero platicar acerca de la importancia de la retroalimentación en el estudio. La retroalimentación o también conocida cómo crítica constructiva es muy importante para volvernos mejores compositores, productores e ingenieros y por ende poder crear mejor música.
Hablo específicamente de la crítica constructiva porque también existe el lado oscuro de la crítica que es la crítica negativa.
Esta segunda, simplemente está ahí para desanimarnos, afectarnos y estancarnos. Lo importante siempre es hacer caso omiso a estas malas vibras y seguir enfocados por el camino del éxito que queremos llegar a tomar.
Un ejemplo claro
La retroalimentación no solamente es saludable para cualquier tipo de negocio, si no que es indispensable y necesaria. Te pongo de ejemplo una compañía tan grande cómo Avid.
Avid (antes Digidesign) por mucho tiempo fue la compañía amo y maestro dentro de la industria musical en cuestión a grabación y producción. Simplemente eran el estándar dentro de los estudios de grabación profesionales, antes de que si quiera existieran los Home Studios.
Conforme fue pasando el tiempo y los Home Studios se empezaron a volver factibles, emergieron nuevas compañías innovadoras en el mundo de el software digital de audio.
Poco a poco Avid se empezó a quedar estancada dentro de sus mismas prácticas anticuadas, mientras que las demás empresas escuchaban a sus clientes y resolvían los problemas gritados por los usuarios.
Empezó a suceder que muchos usuarios de Pro Tools se empezaron a mudar a plataformas cómo Logic, Ableton Live, Studio One, entre otros porque simplemente Avid no hacía nada para resolver sus problemas.
Para no hacerte el cuento más largo, hasta el punto en el que Avid cambió sus prácticas y empezó a resolver las necesidades de los usuarios, es entonces que volvió a recuperar el terreno perdido y ahora vuelven a ser la compañía arrolladora que fueron en un pasado. Todo esto gracias a escuchar la retroalimentación de los usuarios.
¿Cómo aplica a nosotros?
Si las compañías pueden salir beneficiadas con la retroalimentación de los usuarios, también nosotros podemos sacar provecho de esto.
Si quieres volverte mucho mejor al mezclar, componer, producir, etc, entonces absolutamente es muy importante que recibas retroalimentación constructiva.
Conforme obtengas más y más retroalimentación, aprenderás que hacer o no hacer la siguiente vez. Antes de que lo sepas estarás haciendo música increíble.
Pero antes de que obtengas retroalimentación te quiero compartir unas cosas:
¿Cómo obtener buena retroalimentación?
1. Para obtener buena retroalimentación asegúrate de mostrarle la música a la gente que la evaluará de una manera honesta.
Generalmente siempre tendrá que ser alguien que no involucre a tu madre, hermana, pareja. Sinceramente no queremos escuchar que nuestra mezcla o producción es perfecta – al contrario, queremos saber las imperfecciones para poder hacerlo mejor.
2. Hazte la expectativa de que necesitas recibir crítica constructiva. No le preguntas a alguien si les gusta tu mezcla.
Preguntas cómo pudiera ser mejor. Esto le va a permitir a la persona sentirse a gusto dándote crítica constructiva sin problema. Si alguien te responde “así está perfecta,” pregunta sobre ciertos elementos en específico. “¿Las guitarras suenan muy fuertes?” “¿Te gusta el sonido de la voz?”
3. Obtén opiniones múltiples.
La basura de una persona puede ser el tesoro para otra. No puedes tener una buena evaluación de tu mezcla si solamente lo está escuchando una persona.
¿Cómo usar la retroalimentación apropiadamente?
1. No importa cuán preparado estés para recibir retroalimentación, siempre la crítica va a doler de alguna forma u otra.
Escuchar que el bajo no está tan definido, que la mezcla suena sucia, que le falta definición, etc siempre va a ser un golpe al estómago un poco doloroso. Es normal.
Después de todo el tiempo y creatividad que le invertimos, lo último que queremos escuchar son críticas. Lo importante es dejar la afectación a un lado rápidamente y más bien tomar las críticas cómo algo que nos va a beneficiar a nosotros y a la música en general.
2. Lo primero que tienes que hacer al hacer un cambio en tu sesión es Guardarla cómo un archivo independiente.
No hay nada peor que hacer movimientos, guardarlos en la misma sesión y después no poder regresar a la versión original que tanto te gustaba. Al guardarlos cómo archivos individuales puedes hacer los cambios que quieras y comparar unas versiones con otras.
3. Repite el ciclo otra vez.
No des por hecho que al hacer una revisión tu mezcla ya está lista. Vuelve a pedir otros puntos de vista, evalúalos y toma decisiones. Quizá sea un proceso un poco más tardado pero te prometo que vale muchísimo la pena.
¡Así que en tu siguiente proyecto pide opiniones, pide críticas constructivas y te volverás mucho mejor en lo que haces!